viernes, 29 de abril de 2005

Poniendome al día

Hace muchísimo que no escribo nada de nada, pero es que nunca estuve con taaaan poco tiempo como estos últimos días. Después de todo, y para satisfacción de mi padre, empecé la universidad. Tres de las conclusiones que saqué luego de tres meses de facultad:

- el programa de estudio de las ingenierías es ABSURDO;

- Hay muchos machistas que creen que las mujeres no pueden saber nada;

- Es cierto, las universidades en verdad son criaderos de mutantes;

Vamos, nadie anda por el mundo calculando la fuerza de un auto que pasa a tres km de donde está parado, nadie va al supermercado a armar una matriz con precios para calcular su determinante, y absolutamente nadie se sube a un tren y traza su recorrido para determinar mediante rectas la ecuación resultante. Hay que estar enfermo de la cabeza, cierto?

Hace algo de dos semanas estaba el profesor de álgebra explicando cómo resolver un ejercicio, y pregunta "Dicho eso, ¿cuál es el resultado?" Por ser algo más simple que 2+2, respondo naturalmente "Tres negativo" e inmediatamente todos los asistentes a la cátedra se dan vuelta para mirarme, cuando uno dice "si lo dijo una mujer no puede estar bien", al tiempo que el profesor decía "claro" y seguía explicando. Pueden imaginar mi cara de asombro al escuchar semejante barbaridad. Es indignante que todavía exista gente tan idiota.

Ya entiendo todos esos chistes sobre ingenieros. En un lugar así, ¿quién no se volvería loco? ¿Cuánto tiempo me quedará antes de perder mi cordura? ¿Todavía la tengo? ¿Alguna vez la tuve?

Dudas que nunca voy a sacarme.